CRECIMIENTO DEL RIO BERMUZA Desde hace ya mucho tiempo, nuestro rio Bermuza no es el que era, eso es algo que todos a pesar de lo que nos duele, recordamos. Recordamos aquel rio, lleno de agua fresca, rodeado de verdes hierbas y empinados juncos ( quien no se ha pinchado nunca con la punta seca de un junco...) y el ruido de sus cascadas, y sobre todo con agua en abundancia, aquel rio que donde por algunos sitios por donde tenias que pasar para llegar a tu vancal, o " roalillo de tomates " te las tenias que ingeniar para cruzarlo por medio de algunas piedras ya situadas estratégicamente depositadas hace mucho tiempo por algún ingeniero, que en algunas veces ( según el camino del rio a pasar ) se habia tomado la molestia de colocar cualquier tipo de mini puente de madera entre piedra y piedra. El tema estaba en que la mayoria de las piedras tenia poca base para pisar, a veces el salto entre piedra y piedra se hacia difícil, por lo lejano del espacio entre las mismas, eso sin contar que no todas eran firmes y que mas de una flaqueaban y se movian, y encima resvalaban por ese verdín que criaban a modo de musgo o hongo escurridizo... Y ahí estabas tú, en una orilla del rio, y la otra parte en la otra, tan cerca, pero tan lejos, tu camino dividido por el agua, lo mas parecido a las pruebas del programa humor amarillo, que bonito, aunque no tan bonitas eran aquellas sandalias que llevabas, metidas por el dedo, que te las habia comprado tu madre nuevas para ese verano porque las del año pasado te las cargastes un dia que te caistes por cruzar el rio, para mas inri encima. Un compromiso, vamos, y lo peor era caerse al rio en invierno, porque valla si estaba fria el aguita, además, los vaqueros tardaban mucho en secar... Pero estarán ustedes de acuerdo conmigo que dariamos lo que fuese por volver a vivir otra vez esos tiempos, los mejores de nuestro ahora desgraciado rio. Ya nadie baja a por agua a la fuente del embalse de el barrio, o a la que habia por el molino aquel de " el correo ", entre otras cosas porque esas tales fuentes ya no existen, una pena. Otra pena es no volver a ver a los crios pasar por la puerta de tu casa a las cuatro de la tarde ( cuando mas calor hacia ) de camino a darse un refrescante chapuzón en el " pozo romanzo ", que saltos lo de nuestro amigo Gabi o Burlón. Aunque la mayor pena de todas, es ver la penosa vida que vive actualmente nuestro rio Bermuza, gracias sobre todo al espeluznante problema del cambio climático y a alguna que otra artimaña de denunciados desvios presuntamente casi ilegales para algunos de nuestro como siempre unido y leal ayuntamiento. Mientras tanto, podemos disfrutar ( temporalmente, claro ) de estas vistas del rio tan crecidas gracias a las benditas últimas lluvias que a nuestra barriada se presentaron hace unos dias. Para captar esas imágenes alli estuvo mi amigo Ruicesñor acompañado de otro gran amigo llamado Burlón. Estas fotos fueron las que tomaron: